Si has soñado con un cutis suave y terso como el de los bebés, no eres la única. Nos referimos a esa tez sin filtros ni photoshop que todo el mundo persigue… una piel sana, ese es el objetivo, ¿verdad?
Mientras que solo unas pocas afortunadas nacen con una piel de porcelana gracias a los buenos genes, las demás tenemos que recurrir a una larga lista de productos de cuidado facial y tratamientos estéticos para poder presumir de tez.
En otras palabras, es posible conseguir un cutis resplandeciente y saludable aunque la madre naturaleza no haya sido generosa contigo.
Obviamente, no todo funcionará para todas las pieles, pero la buena noticia es que hay algunos consejos demostrados y probados que te ayudarán a conseguir la mejor versión de tu tez. ¿Impaciente por saber cuáles son? ¡Aquí los tienes!
9 consejos probados para conseguir una piel sana
Aunque puedes encontrar un sin fin de secretos para el cuidado diario de la tez en foros, blogs y webs, hemos recopilado una lista de consejos propios, es decir, que a nosotros y a nuestros clientes les han funcionado de maravilla con excelentes resultados.
Tanto si tu rutina de cuidado facial consta de 3 como de 10 pasos, sigue estos 9 consejos para tener un cutis sano y poder pavonearte con confianza y mostrar al mundo lo guapa que eres, por dentro y por fuera.
1. Límpiate siempre la cara antes de acostarte
Hay una razón de peso por la que este consejo es el primero de nuestra lista: tu rutina de cuidado de la piel debe empezar siempre con una cara recién limpia, sin excepciones.
Si piensas en toda la grasa, las bacterias, la contaminación y las impurezas que se han acumulado en tu cutis a lo largo del día, no hay forma de que quieras que esa suciedad permanezca en tu rostro durante la noche también.
Acostúmbrate a lavarte la cara cada noche antes de acostarte con un limpiador suave, como nuestra Agua Micelar Todo en 1, con respetuosas micelas que capturan cualquier rastro de maquillaje y suciedad en una sola pasada; para mantener la piel limpia y maximizar la eficacia de los productos que pongas a continuación. No necesitarás incidir demasiado ni arrastrar el rostro con el algodón, una suave pasada es suficiente para retirar cualquier residuo.
Por supuesto, por la mañana también debes lavar tu cara -sobre todo si es un cutis propenso al acné o a la grasa- para retirar los restos de sudor, saliva y grasa que también se acumulan por la noche. El agua micelar sigue siendo una opción estupenda en esta ocasión, pues es más respetuosa con la dermis que muchos limpiadores de espuma o gel.
2. Mantén tu piel hidratada
Si tienes tendencia a la sequedad, la descamación y la falta de brillo u opacidad, es probable que tu tez pida a gritos un extra de hidratación.
Sacia la sed de tu epidermis con productos hidratantes como un sérum o una crema altamente hidratante. Tu tipo de piel determinará qué tipo de crema hidratante es la mejor para ti, así como los ingredientes concretos que debes buscar.
El ácido hialurónico, el escualano y el aloe vera son muy hidratantes, por lo que son especialmente beneficiosos para las pieles secas. Si tienes el cutis graso, opta por una crema hidratante que sea ligera, sin aceites y no comedogénica para no taponar los poros.
Nuestra Crema Hidratante Aloe Vera es una gran opción, ya que está diseñada para no deja la cara con sensación de grasa y no causar brotes de acné. Además, su ingrediente estrella es el aloe vera, y lo acompañan el escualano y el aceite vegetal, creando un escudo contra la sequedad.
Según la Escuela de Medicina de Harvard, la crema hidratante es fundamental, pero no es la única forma de hidratar la dermis.
Para aquellos que necesitan una hidratación más profunda, nuestro Serum Vitamina C está compuesto por una buena cantidad de ácido hialurónico, además de un precursor de este compuesto que mantiene la hidratación cutánea a lo largo del tiempo, Fucogel y aloe vera, una combinación que promueve la renovación celular, protege tu dermis contra los factores de estrés ambiental, combate los signos de envejecimiento y mantiene tu piel suave y húmeda por más tiempo.
También puedes aportar un extra de hidratación bebiendo la cantidad de agua recomendada: de 2 a 3 litros todos los días.
3. Salva tu piel con protección solar
Puedes utilizar todos los productos para el cuidado de la piel del mundo, pero si sigues exponiendo tu tez al sol sin la protección adecuada, te estarás poniendo en riesgo de sufrir daños en la dermis, cáncer de piel, decoloración, líneas finas y arrugas.
Utiliza un protector solar de amplio espectro, como nuestra Crema Solar Facial SPF 50+ que funciona como el máximo protector al ofrecer una protección total contra los rayos UV, la luz azul, los contaminantes ambientales y los radicales libres.
Y lo que es mejor, no produce brotes ni deja una capa blanca después de la aplicación. Es hidratante y no comedogénico, lo que significa que no obstruye los poros, y deja un acabado suave muy confortable. Además, contiene un complejo de antioxidantes que te ayudarán a retrasar los signos de envejecimiento.
Aplícalo todos los días -sí, incluso en invierno- para proteger tu dermis durante todo el año. Más que a prueba de sol, es a prueba de vida. Protege tu rostro y tu cuerpo de los dañinos rayos UV, los radicales libres, la luz azul y los contaminantes ambientales con productos de la mejor calidad.
4. Evita el agua caliente
Cuando se trata del cuidado de la dermis, los pequeños ajustes pueden marcar una gran diferencia. Te sorprenderá saber que la temperatura del agua tiene un efecto sobre el estado de tu cutis.
El agua caliente puede resultar agradable y relajante, especialmente durante las estaciones más frías, pero ducharse y lavarse la cara con agua caliente puede despojar a la tez de sus aceites naturales y provocar sequedad e irritación, lo cual es una mala noticia especialmente para quienes tienen el cutis seco, sensible o con tendencia al acné.
Si alguna vez has notado tirantez en rostro, enrojecimiento, piel escamada o con picor después de salir de la ducha o de lavarte la cara, es probable que esté seca. En su lugar, utiliza agua tibia, ya que es una temperatura más suave para la dermis, y sécate con palmaditas.
5. Añade cosméticos extras cuando sea necesario
Hay ciertos pasos para el cuidado facial que deben realizarse todos los días, pero también puedes añadir pasos adicionales cuando sientas que tu cutis necesita un poco más de ayuda y cariño.
La exfoliación debería formar parte de tu rutina semanal para ayudar a eliminar las células muertas de la epidermis y dejar sitio a las células más jóvenes y sanas.
La exfoliación también ayuda a eliminar la falta de brillo, las líneas de expresión, las arrugas y el tono y la textura irregulares del cutis. Ten en cuenta que los exfoliantes no son de talla única, así que asegúrate de utilizar uno que funcione bien con tu tipo de tez. Exfóliate con regularidad, pero ten cuidado de no excederte y ser víctima de los peligros de la sobreexfoliación.
Otro paso adicional que te ayudará en tu viaje hacia una piel sana es una mascarilla facial. Utiliza una mascarilla cada pocos días para darle a tu cutis un tratamiento facial profesional en casa.
Si en tu régimen habitual falta una mascarilla de calidad, llena ese vacío con nuestra Mascarilla Facial Vitamina C, una máscara de arcilla en formato crema diseñada para limpiar los poros en profundidad, iluminar, hidratar la cara, con la ayuda de la vitamina C, el caolín y otros productos botánicos que cuidan la dermis. Desintoxica tu rostro de los factores de estrés diarios y revela un cutis más brillante, suave y luminoso.
6. Trata la piel del contorno de ojos con suavidad y eficacia
Como todos sabemos, los problemas del contorno de ojos -ojeras, hinchazón, patas de gallo, arrugas, etc.-a menudo se interponen en el camino de un cutis brillante y una mirada revitalizada. Pero mucha gente no utiliza un cosmético específico para esta zona tan delicada y se ponen cualquier crema que encuentran en casa, o no se ponen nada en absoluto, lo que pone la tez en riesgo de sufrir daños y otros problemas a largo plazo.
Lo ideal es que te hagas con una crema para el contorno de ojos que sea suave con esta zona y que tenga ingredientes activos eficaces para luchar contra tu problema.
Nuestro Contorno de ojos Antiage está pensado especialmente para tratar los signos del paso del tiempo y los movimientos repetitivos de tu mirada. Su fórmula natural hidrata y nutre, mientras que reduce de forma progresiva las arrugas y líneas que se forman alrededor del ojo. Aplica solo una pequeña cantidad y repártela uniformemente a toquecitos con la yema del dedo anular -el que menos fuerza tiene-.
7. Duerme lo suficiente
Cuando piensas en cómo conseguir una tez impecable, los productos y tratamientos tópicos para el cuidado de la piel pueden ser lo primero que te venga a la mente. Pero la realidad es que tus hábitos diarios, como tu horario de sueño, y la calidad de éste son igual de importantes.
Tu cuerpo entra en un estado de regeneración mientras duermes y trabaja para repararse durante la noche.Por eso, la falta de sueño no sólo se manifiesta en la cara en forma de ojeras y signos de envejecimiento, sino también en forma de brotes.
El cuerpo responde a la falta de sueño produciendo cortisol, una hormona del estrés. El aumento de los niveles de cortisol puede provocar un aumento de la inflamación, lo que puede causar brotes y empeorar las condiciones de la piel existentes.
¿Cuál es la clave? Vete a dormir a una hora razonable, y asegúrate de que tienes una buena noche de sueño reparador para que puedas cuidar tu dermis en el proceso. Quizás sea necesario que hagas una rutina de sueño unos minutos antes, como apagar las pantallas y la luz artificial, darte un baño relajante, leer un rato o ponerte música suave.
8. Recuerda que los cosméticos de lujo no siempre son los mejores
Los productos de lujo no siempre equivalen a mejores resultados. Si el objetivo es una tez sana, los productos de cuidado de la piel asequibles o de marcas no tan conocidas pueden ser igual de eficaces, si no más.
Entendemos que puede ser difícil separarse de tus favoritos de siempre, y que las campañas de marketing de las marcas más potentes son muy persuasivas, pero mantén la mente abierta cuando se trata de productos de calidad.
En Nezeni siempre hemos creído en apostar por una cosmética natural, con activos eficaces y en altas concentraciones, y que tuviese cero irritantes y los mínimos conservantes posibles para evitar el efecto combinado de los cosméticos. Además, nuestros precios están ajustados para que no pagues de más por tu cuidado facial.
Y recuerda: el mejor cuidado de la piel no tiene que ser siempre el más caro. Lo más importante es que te tomes el tiempo necesario para informarte sobre los ingredientes y saber qué es lo mejor para tu tipo de cutis. Esto te ayudará a tomar mejores decisiones cuando busques nuevos productos cutáneos.
9. Sé constante
Si esperas tener una dermis sana y limpia de la noche a la mañana, te llevarás una gran decepción. La constancia afectará en gran medida a la eficacia general de los productos, por lo que, una vez que hayas establecido tu rutina de cuidado de la piel, no te desvíes de ella y ten expectativas realistas.
La capa superior de la piel tarda aproximadamente 28 días en regenerarse, por lo que es importante ser constante y paciente con el régimen facial. Para conseguir una tez limpia y sana, tienes que reconocer que el cuidado del rostro es un proceso y un viaje. Tómate el día a día, escucha las necesidades de tu dermis y pronto tendrás la piel de tus sueños.
Si tienes alguna duda acerca de nuestros productos o protocolos de belleza, estaremos encantadas de ayudarte a través de nuestro contacto: [email protected].