Si estás aquí, ya sabes que la vitamina C es buena para ti. Tal vez la tomes por vía oral en tu zumo de naranja diario, o tal vez hayas encontrado un serum que realmente satisfaga todas tus necesidades.
En cualquier caso, estás haciendo un bien a tu tez y a tu cuerpo. ¿Pero qué tipo de bien? La vitamina C -o ácido ascórbico- beneficia al cuerpo humano de muchas maneras, pero para el cuidado de la piel es maravillosa.
Lo hace todo: ilumina, potencia el colágeno, desvanece la hiperpigmentación, combate los daños del sol, minimiza las toxinas ambientales, reduce el enrojecimiento y, lo que es más importante, previene las líneas finas y las arrugas. ¡Incluso cura las quemaduras!
Todo el mundo -jóvenes, mayores, todo tipo de pieles– debería utilizar un cosmético con vitamina C, especialmente porque los niveles naturales de esta molécula disminuyen con la edad -lo que se traduce directamente en menores niveles de colágeno-.
En definitiva, la vitamina C es la clave para un cutis más brillante, más firme y más sano. ¿Te parece poco? Atenta, porque aquí hay una lista de cosas que este activo puede hacer por ti.
Todos los beneficios de la vitamina C para la piel
Junto con una gran variedad de beneficios importantes para la salud, el ácido ascórbico es clave para la salud y calidad de la piel también.
Para que veas lo que te estás perdiendo si todavía no la has incorporado a tu rutina de cuidado facial, aquí tienes algunos de los grandes beneficios de este activo para la dermis.
1. Previene la aparición de las arrugas y las líneas de expresión
¡Todas nos deprimimos cuando vemos en nuestro rostro los signos de envejecimiento! Arrugas, surcos, líneas de expresión… ya sabes de lo que te hablo.
Por suerte, la vitamina C funciona maravillosamente para prevenir y evitar estos signos no deseados mediante el aumento de la creación de colágeno natural de nuestro cuerpo.
Los resultados de dos estudios encontraron que una mayor ingesta de vitamina C estaba asociada con una buena apariencia de la dermis, y se ha demostrado que su aplicación tópica durante 12 semanas impulsa el colágeno al aumentar la producción de los aminoácidos necesarios para producirlo -glicina, hidroxiprolina y prolina-.
Un dato curioso: el ácido ascórbico no sólo favorece la producción de nuevo colágeno, sino que también protege el colágeno existente en el rostro -lo cual es estupendo porque no queremos que se pierda nada de nuestro precioso colágeno-. Esto mantiene la dermis firme, tersa y llena de vida.
Una cosa -muy- triste a tener en cuenta… la vitamina C no puede eliminar las líneas finas y las arrugas existentes, pero sí puede prevenir su desarrollo prematuro. Así que la prevención es la clave, y por eso hay que utilizarla cuanto antes para parecer más joven sin cirugía.
2. Protege contra los daños del sol
La exposición prolongada y sin protección a los rayos solares puede afectar negativamente a tu piel, formando manchas, resecando, irritando o incluso dañando las células.
Junto con un protector solar de amplio espectro, la aplicación tópica de la vitamina C funciona como un antioxidante para proteger del daño de los rayos UV del sol.
Esta acción antioxidante combate el daño de los radicales libres que se generan a partir del daño solar, la contaminación, los productos químicos y las toxinas ambientales, y que causan el envejecimiento prematuro como las líneas finas y las arrugas, la flacidez, las manchas de la edad y, en el peor de los casos, el cáncer de piel.
¡La vitamina C es un gran ingrediente para proteger tu dermis en un mundo de daños por radicales libres! Y la combinación de vitaminas C y E es más efectiva para prevenir la tez del daño solar que la C por sí sola.
3. Proporciona hidratación a la piel
Aunque no es su cualidad principal, el ácido ascórbico retiene el agua en la epidermis, impidiendo que se evapore, lo que evita que se vuelva reseca y tirante. Esto trae un sinnúmero de beneficios para la dermis, como ya te explicamos aquí.
4. Ayuda a la curación de las heridas
La gran cantidad de ácido ascórbico que presenta la vitamina C actúa eficazmente en los procesos de curación de la piel, ayudando a la rápida cicatrización de las heridas.
Cuando se aplica de forma tópica, actúa instantáneamente para curar una herida acelerando la producción de colágeno y elastina. El colágeno y la elastina son fibras proteínicas que mejoran la regeneración de las células cutáneas y que además hacen que la piel esté firme y tensa.
Por eso funciona mejor cuando se aplica por vía tópica que cuando se ingiere por vía oral.
5. Mejora la elasticidad
Esto va de la mano al favorecer la creación de colágeno. Al aumentar la producción de colágeno y elastina en el cuerpo, ayuda a que la piel se vuelva más elástica, tensa y firme.
Además, recuerda que también protege contra los radicales libres protegiendo el colágeno existente de su ruptura.
6. Reduce la pigmentación oscura y las manchas
La pigmentación oscura, también conocida como hiperpigmentación, es causada por el aumento de la producción de melanina, un pigmento que da color a la piel.
La hiperpigmentación generalmente no es dañina, pero puede resultar muy antiestética generando manchas que pueden provocar una baja autoestima.
La aplicación tópica de ácido ascórbico puede ayudarte si este es tu problema. Tiene el poder para unificar la tez en general y aclarar la hiperpigmentación -pecas, manchas solares, manchas de la edad, cicatrices de acné, cualquier otro daño solar, etc.-
¿Cómo lo hace? Reduciendo los niveles de melanina -niveles de pigmentación de la piel- al cortar el suministro de lo que nuestra dermis utiliza para producir melanina: la tirosina. Menos tirosina significa menos melanina, lo que significa manchas oscuras difuminadas.
Para que conste, no confundas aclarar con blanquear. La vitamina C aclarará las manchas oscuras hasta igualar el tono base de tu cutis, pero no blanqueará tu piel.
7. Ilumina la tez
Si quieres que tu cutis brille como un diamante, no hay mejor ingrediente que la vitamina C. La combinación de una reducción en la hiperpigmentación, menos enrojecimiento y el refuerzo del colágeno significan el adiós a la piel cansada y apagada.
8. Ayuda a reducir la inflamación
La vitamina C es un gran antiinflamatorio, así como un antioxidante que ayuda a reducir los signos de inflamación como erupción, enrojecimiento e irritación. También es capaz de fortalecer los vasos sanguíneos y minimizar la aparición de capilares rotos.
Esto puede ayudar a mejorar diversas condiciones de la piel derivadas de la inflamación, como la rosácea, el acné, o la psoriasis.
¿Cómo utilizar la vitamina C en tu rutina diaria de la piel?
El ácido ascórbico está repleto de varios nutrientes, incluidos los antioxidantes. Y aunque se puede obtener de la dieta, comiendo alimentos ricos en vitamina C, no hay garantía de que llegue a la piel.
Para obtener los mejores resultados en la dermis hay que aplicarla de forma tópica.
La vitamina C se presenta normalmente en las capas de la piel llamadas dermis y epidermis, donde estos nutrientes son transportados desde el torrente sanguíneo.
El envejecimiento, la contaminación o la exposición a los rayos UV pueden reducir la disponibilidad de la vitamina principalmente desde la epidermis. La ingesta de vitamina C por vía oral es muy eficaz, pero menos que la aplicación tópica.
Existen diferentes tipos de opciones en el mercado, como lociones que contienen vitamina C, cremas hidratantes, sueros y exfoliantes.
Sin embargo, muchos dermatólogos se decantan por el serum para obtener los mejores resultados, ya que el serum es una fórmula más concentrada en activos y de textura ligera que se absorbe fácilmente en la dermis.
El mejor serum de Vitamina C
Quiero compartir con vosotras nuestro producto favorito con vitamina C para cosechar todos estos beneficios que hemos visto anteriormente. Y este es el Serum Vitamina C de Nezeni Cosmetics, ideal para prevenir el envejecimiento, potenciar la luminosidad, reducir las manchas y disminuir las líneas finas y las arrugas. Un cosmético que no contienen parabenos, sulfatos ni ftalatos, y su nivel de conservantes es realmente reducido.
¿Cuándo usarlo? Aplica el serum por la mañana para conseguir fotoprotección contra los rayos UV, y en la rutina de noche para combatir los radicales libres mientras duermes. Además, por la mañana no debes olvidar aplicar un protector solar antes de salir de casa.
Para obtener los máximos resultados, deja que tu producto se seque completamente antes del siguiente paso de tu rutina de cuidado de la piel. Aplica una crema hidratante inmediatamente después del serum para impedir que la dermis absorba completamente la vitamina C.
Para potenciar sus efectos, puedes combinarlo con la Mascarilla Facial Vitamina C.
Consejos para maximizar los beneficios
Se constante
Los resultados no se obtienen de la noche a la mañana. La constancia es la clave. Se necesitarán de 6 a 8 semanas de uso tópico constante antes de empezar a ver mejoras significativas. Ten paciencia, las cosas buenas llegan a los que esperan.
Cierra la tapa con el uso
La vitamina C se oxida al entrar en contacto con el oxígeno y la luz -es decir, su composición química cambia y, en consecuencia, deja de ser beneficiosa para la piel-. Cuando esto ocurre, el producto adquiere un color marrón amarillento.
Para que esto no pase, asegúrate de que el envase esté sellado y embotellado en tubos opacos o botellas con bomba, o al menos en una botella de color ámbar oscuro. Pon el tapón y guárdalo en un lugar fresco y oscuro. Si te olvidas y el producto se expone al aire durante un periodo de tiempo prolongado, las capacidades de hiperpigmentación y antienvejecimiento de la vitamina C se anularán.
Entre el 15% y el 20% es lo mejor
Los productos más eficaces para el cuidado de la piel con ácido ascórbico son los sueros que tienen una concentración del 15% al 20%. No son para todo el mundo, ya que las concentraciones más altas de ácido ascórbico pueden resultar irritables para las personas con tez sensible. Consulta a tu dermatólogo si quieres probar un enfoque más agresivo.
Está bien empezar con una concentración más baja e ir subiendo poco a poco mientras la tez se va acostumbrando. Lo único que se necesita suelen ser pequeñas cantidades y lo mejor es utilizarlo sobre la tez limpia antes de otros productos.
Busca un buen derivado del ácido ascórbico 👀
El ácido ascórbico es la forma más pura y más investigada de vitamina C tópica, pero no es la más recomendable ya que es muy susceptible de degradarse y de causar irritaciones. Existen otras versiones de ácido ascórbico, como fosfato de ascorbilo de sodio, palmitato de ascorbilo, o ascorbato de retinilo, pero sin duda, el glucósido de ascorbilo es el mejor derivado, tanto por sus resultados como por su alta tolerancia, incluso para pieles sensibles.
Combínalo con otros antioxidantes
Las vitaminas C y E pueden luchar contra el daño de los radicales libres por separado, pero su combinación realmente aumenta el poder y la potencia de ambos ingredientes. ¿Por qué? Porque se recargan y regeneran, y pueden durar más en el cuerpo.
Un estudio descubrió que la vitamina E y el ácido ferúlico multiplican por ocho la eficacia de la vitamina C. También se absorben mejor cuando se combinan. La C funciona mejor a nivel superficial, mientras que la E es soluble en aceite, lo que significa que puede ir a una mayor profundidad.
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