La diferencia entre el serum y la crema hidratante es obvia, y no tan obvia. A primera vista, uno se ve claro, líquido y es casi imperceptible cuando se aplica, la otra es de color blanco, tiene una consistencia más cremosa y tarda un poco en absorberse.
¿El serum ofrece más beneficios que la crema hidratante a tu piel? ¿Cuál hay que aplicar primero? ¿Son para todos los cutis? Todas estas son preguntas que la apariencia no puede revelar del todo. Y para eso estamos aquí, para conocer juntas las diferencias y similitudes del suero y el humectante, y que de esta manera puedas decidir lo que mejor le sienta a tu cutis.
¿Cuál es la diferencia entre el serum y la crema hidratante?
La respuesta a esta pregunta es como la diferencia entre un pimiento rojo y un aguacate. Te comes ambos. Ambos tienen nutrientes deliciosos y ambos brindan una gran energía. Sin embargo, no hacen esto de la misma manera. El pimiento rojo le da a tu cuerpo los beneficios de la vitamina C, mientras que el aguacate proporciona un impulso saludable de grasas monoinsaturadas.
Los dos vegetales hacen grandes cosas, pero las hacen de diferentes formas.
Hay 3 diferencias clave entre el serum y la crema hidratante:
- La profundidad a la que llegan en las diferentes capas de la piel.
- La mayoría de los sueros brindan tratamiento, mientras que los humectantes brindan condición. -No te preocupes si esto no significa mucho para ti en este momento, más abajo lo explicamos-.
- Uno actúa contra la barrera de la piel, la otra trabaja con ella; esta parte te ayudará a comprender cuándo aplicar el suero y cuándo aplicar la crema hidratante.
Empecemos por la primera diferencia.
1. Profundidad en la penetración
Tu piel tiene 3 capas, y todas tienen una biología muy diferente.
La capa exterior -la epidermis- es la más dura. En su mayoría está formada por grasa, y al igual que el cabello, sus células están -casi- muertas. Estos elementos ayudan a formar una barrera cutánea impermeable, nuestra primera línea de defensa. Bloquean la humedad y mantienen alejadas a las bacterias y alérgenos que quieren entrar.
A medida que profundizamos en la epidermis, llegamos a la capa intermedia -la dermis- la biología de la piel cambia. Aquí, las células cutáneas y el entorno que las rodea son principalmente a base de agua. Estas células están vivitas y coleando.
Y por último, la capa más interna -la hipodermis- es la que almacena la grasa.
Y de todo esto se deduce la primera respuesta a tu pregunta: ¿Cuál es la diferencia entre el serum y la crema hidratante? Pues que los sueros tienen una base de agua, y los humectantes son a base de agua y aceite.
Lo que significa que el serum es más ligero -porque contienen menos rellenos, espesantes y agentes lubricantes- y puede penetrar a través de las diferentes capas de piel hasta encontrar las que son más afines a él, las que contienen agua; mientras que la crema hidratante es más pesada y tiende a quedarse en las zonas superiores, cuyos compuestos le son más afines.
Y esta profundidad a la que llegan es importante por una razón: la diferencia número 2.
2. Condición versus tratamiento
Los serums benefician a tu piel al ofrecerle tratamiento, mientras que los humectantes le brindan condición. Si no tienes idea de la diferencia entre condición y tratamiento, no te preocupes, te ponemos un ejemplo a continuación.
Digamos que tienes un área de la piel que es de un color diferente al de tu tono natural. Tal vez sea una cicatriz causada por hiperpigmentación, tal vez sea melasma, o una mancha de la edad. Sea lo que sea, ese color se está formando en las capas más profundas de la piel… y si deseas igualar el tono, hay que llegar a la causa.
Como podrás adivinar, lo hay que hacer es usar un serum para llegar a las capas más profundas.
Pongamos que tienes un tipo de tez seca o un tipo de piel que tiene descamación y asperezas frecuentemente. Aquí la causa es una barrera cutánea debilitada, lo que significa que debes reacondicionar las capas superiores para que puedan volver a ser impermeables y evitar que se evapore la humedad.
El acondicionamiento del cuidado de la piel mejora la salud de la barrera cutánea, es como una medicina preventiva.
El cuidado de la piel basado en tratamientos ayuda a abordar los problemas de piel existentes, por ejemplo, pigmentación, líneas finas y arrugas. De hecho, en Nezeni contamos con dos tipos de serums: Antiarrugas se encarga de tratar y reducir la profundidad de líneas finas y arrugas; mientras que Vitamina C recupera la luminosidad y repara los daños de los radicales libres.
En comparación con las capas superiores de la piel, que son en su mayoría una pared de ladrillos de células cutáneas muertas, las capas más profundas a las que llegan los sueros están llenas de colágeno, elastina y células productoras de pigmentación. Saber esto te ayudará a decidir si las preocupaciones o problemas requieren el uso de una crema hidratante o un serum.
Entonces, ¿Cuál es la diferencia entre serum y crema hidratante? Que los humectantes son acondicionadores, tratan las capas más superficiales y son excelentes para prevenir la aparición de problemas de piel. Mientras que los serums ayudan a tratar los problemas de la piel desarrollados en las capas más profundas, estos son los problemas asociados con cosas como el envejecimiento, el daño solar y más.
Aunque es cierto que las cremas hidratantes generalmente contienen activos para abordar problemas específicos como el envejecimiento prematuro, pigmentación u acné, su cometido principal es hidratar la piel y mantenerla allí.
Esto es precisamente lo que hacen nuestras dos cremas hidratantes. Tanto la crema Hidratante Aloe Vera como la crema Hidratante de Noche aportan una profunda hidratación al mismo tiempo que abordan otros problemas de cutis. Sellan la humedad y reponen el agua perdida sin utilizar ingredientes comedogénicos que taponen los poros.
Entonces, solo queda una pregunta por responder: ¿Necesito serum y crema hidratante? Aquí es donde entra en juego la diferencia número 3.
3. Cómo juegan con la barrera cutánea
¿Recuerdas la capa más superficial de la piel? Esa es la barrera cutánea, fundamental para protegernos de los agresores externos y evitar que la capas de dentro pierdan humedad, algo que sucede cuando la barrera cutánea no funciona de manera correcta.
Los serums derrotan la barrera cutánea para llegar a las capas más profundas de la piel. Mientras que los humectantes reparan y reacondicionan una barrera cutánea derrotada, sellando la humedad natural del cuerpo.
Esto quiere decir que en la mayoría de los casos necesitas ambos cosméticos. Uno para tratar y solucionar los problemas, y el otro para proteger y reparar la barrera cutánea.
El hecho indiscutible es que todos necesitamos cuidar nuestra piel para estar y lucir sanos, así que debemos utilizar todas las armas que tenemos a nuestra disposición.
Es normal que a estas alturas te estés preguntando cómo utilizar el serum y la crema hidratante, ¿cuál va primero? ¿en qué paso de la rutina se introducen? ¿cuándo aplicar el suero facial con humectante? Y todas estas cuestiones las vamos a aclarar a continuación.
Cómo introducirlos en tu rutina de cuidado de la piel
¿Has oído hablar del layering? Es la teoría que debes utilizar para aprovechar al máximo tus inversiones en el cuidado de la piel. Se basa en una ciencia realmente simple y es perfecto para brindar a tu cuidado de la piel la MEJOR configuración para mostrar todos sus beneficios para la tez.
Si no has oído hablar de las reglas del layering, déjanos hacerte un resumen. Esta regla te dice en qué orden debes usar tus productos cosméticos para asegurarte de que puedan penetrar correctamente y actuar de la mejor forma posible.
Se trata de la ciencia de la “densidad”, que suena mucho más elegante de lo que realmente es. El layering básicamente dice que cuanto más grueso sea el producto cosmético, más tiempo tardará en penetrar en la dermis. Así que hay que empezar con el más ligero primero, y dejar el más grueso para el final.
Generalmente es así:
- Limpiar
- Exfoliar (no todos los días)
- Producto de tratamiento
- Tónico / esencia
- Serum
- Crema / Hidratante
- Aceite facial
Los primeros pasos son simples, todos sabemos que hay que limpiar primero y acondicionar después. Y según esta regla, el serum iría después de la limpieza y el tónico, justo antes de la crema hidratante.
Es importante que se aplique así por una buena razón. Los serums deben penetrar en las capas medias de la piel lo más rápido posible, antes de que sus propiedades se vean afectadas.
Por eso, si pones un suero rico en vitaminas sobre un producto para el cuidado de la piel más espeso, como una crema, le va a llevar -más- tiempo llegar a donde debe estar, y en ese tiempo todos esos buenos activos son atacados por el aire, lo que los hace “perder su efectividad”. También es la razón por la que los envases de los serums deben ser herméticos o airless, para que no entre aire y los perjudique.
El aceite y el agua no se mezclan, a menos que incluyan ingredientes especiales que se ponen en las cremas -emulsionantes- que aman tanto el agua como el aceite y los unen. Es por eso que poner crema hidratante entre los productos a base de agua y los productos a base de aceite es la mejor opción.
Mantiene la barrera de “segunda piel” ayudando a los ingredientes hasta el final. Los productos para el cuidado de la piel más espesos generalmente tienen ingredientes que ayudan a la barrera cutánea. Estos son excelentes para los tipos de piel seca o áreas con sequedad, ya que es ahí donde la piel necesita más protección.
Se suman al objetivo número uno de la piel: mantener el agua dentro y todo lo demás fuera. Son tus protectores de respaldo. No querrás poner a estos tipos de guardia hasta que todos tus otros preciosos ingredientes para el cuidado de la piel hayan llegado a su casa ¡eh!
Los productos más gruesos sellan todo lo demás. Este es el objetivo principal del layering. ¡Bloquea esa belleza! Los productos más finos a base de agua tienen el hábito de evaporarse o consumir los aceites naturales de la piel, lo que ayuda a que la tez se mantenga hidratada. Es por eso que el agua puede secar e irritar tu piel.
Así que ya sabes por qué la regla de capas para el cuidado de la piel es fabulosa, ¿dónde podría mejorar? La única alteración que se podría hacer es esta: si estás usando un aceite facial como último paso, usa un poco más de humectante adicional como paso final. Esto ayuda a que el aceite facial penetre en la piel, lo que ayuda a mejorar la condición del cutis.
Ha quedado claro ¿verdad? Lo más eficiente es utilizar tanto un serum como una crema hidratante, y la aplicación correcta para que podamos beneficiarnos de todas sus propiedades es primero el suero y a continuación la crema.
Si tienes alguna duda acerca de nuestros productos o protocolos de belleza, estaremos encantadas de ayudarte a través de nuestro contacto: [email protected].