El acné ya es bastante molesto de por sí: no sólo es difícil de tratar, sino que sabemos que también puede afectar a nuestra salud mental. Incluso si eres uno de los afortunados que lo superan con la edad (el acné adulto es muy real), existe la posibilidad de que te queden cicatrices. Y las cicatrices, por desgracia, pueden durar toda la vida.
Como cualquier tejido cicatricial, las cicatrices del acné son complicadas de tratar. Las investigaciones demuestran que los protocolos más eficaces incluyen múltiples modalidades complementarias. Así que aquí tienes nuestras mejores y más eficaces sugerencias.
Cómo se forman las cicatrices de acné y por qué son tan difíciles de tratar
Son el resultado de la inflamación de las imperfecciones de la piel acneica.
Cuando los poros se obstruyen y se hinchan por la acumulación de sebo, células muertas, suciedad y bacterias, pueden romperse sus paredes, tanto en la superficie como en la dermis.
La piel entra entonces en modo de reparación produciendo nuevas fibras de colágeno, pero, por desgracia, éstas no suelen ser tan lisas y uniformes como las de la piel original, por lo que sobresalen y son más evidentes. Además, estas nuevas fibras suelen ser más rígidas y, por tanto, difíciles de desprender.
Se calcula que el 95% de los pacientes con acné vulgar desarrollan algún tipo de cicatriz.
El aspecto del tejido cicatricial resultante puede variar bastante (como se verá más adelante), y cada persona puede presentar varios tipos en la piel, incluso en la misma zona. Tampoco se sabe qué tipo de cicatriz puede desarrollar una persona.
Cada dermis cicatriza de forma diferente y es propensa a desarrollar distintos tipos de cicatrices. Una persona puede no tener cicatrices, mientras que otra tiene cicatrices severas por una gravedad similar de acné.
Tipos de cicatrices de acné y cómo eliminarlas
Más adelante profundizaremos en los detalles, pero a modo de resumen, estos son los tipos de cicatrices acneicas e hiperpigmentación postinflamatoria que puedes esperar tras la aparición de un grano.
Picahielo (Ice pick)
Las cicatrices en forma de picahielo son una forma de cicatriz atrófica. Esto quiere decir que que presentan una forma hundida en vez de elevada. De las cicatrices atróficas, las picahielo son las más difíciles de tratar.
Parecen pequeños agujeros estrechos en la piel, con una caída pronunciada (reciben el nombre de “picahielo” porque tienen el aspecto de haber usado un picahielo en la piel).
También son muy profundas, a menudo se hunden en los niveles inferiores de la dermis y suelen formarse por acné quístico, o acné que se forma en los niveles inferiores de la piel.
¿Cómo se pueden tratar?
Como se ha indicado anteriormente, son increíblemente difíciles de tratar. En algunos casos, nunca se pueden “arreglar” del todo, debido a la profundidad de la lesión.
En estos casos será necesario acudir a la consulta del dermatólogo para una consulta profesional, con los tratamientos típicos sugeridos que van desde el relleno, el láser fraccional y la exfoliación química hasta la escisión en sacabocados, o una forma de cirugía que recorta el tejido cicatricial y vuelve a coser la piel.
Debido a la profundidad de las cicatrices, los cosméticos tópicos y los remedios naturales no pueden eliminarlas, pero pueden mejorar el aspecto general de la piel.
Los activos más potentes, como los retinoides, pueden ayudarte, ya que aceleran la renovación celular.
Cicatrices “en furgón” (Boxcar scars)
Otra forma de cicatrización atrófica, las cicatrices en furgón tienen el aspecto de pequeñas fosas ovaladas, circulares, rectangulares o cuadradas.
Suelen tener una caída pronunciada que desemboca en una cicatriz en forma de U. A diferencia de las picahielo, son más anchas y no suelen penetrar profundamente en la dermis. Al ser más superficiales, también son más fáciles de tratar.
¿Cómo se pueden quitar?
Las cicatrices en furgón responden a la terapia láser fraccionada, que es un tratamiento en consulta en el que un dermatólogo elimina capas de la piel con un láser especial. (Como puedes imaginar, puede resultar doloroso y requiere tiempo de inactividad).
Otros tratamientos incluyen microneedling profesional (no recomendamos que lo intentes en casa, ya que conlleva demasiados riesgos) e inyecciones de plasma rico en plaquetas.
Si todo esto te parece demasiado intenso, lo entendemos. También responden a los peelings químicos -como el glicólico, que suele ser tolerable para la mayoría de los pacientes- si se realizan con regularidad.
En cuanto a los tratamientos caseros, considera los ácidos naturales propios: Los tratamientos y peelings con alfahidroxiácidos o betahidroxiácidos pueden ayudar a exfoliar la capa superior de la piel.
Por eso nuestro Peeling Facial AHA te va a venir fenomenal, pues cuenta con cuatro potentes ácidos (glicólico, azeláico, láctico y tartárico) para renovar todas la células viejas y gastadas minimizando las imperfecciones.
También puede ayudar un retinol. Aquí te enseñamos cómo debes usarlo.
Cicatrices onduladas (Rolling scars)
Las cicatrices onduladas son otra forma de cicatrización atrófica. Se caracterizan por una piel ondulada. Son el resultado de un acné crónico de larga duración, ya que la inflamación y los traumatismos repetidos de la piel crean un tejido cicatricial irregular.
En muchos casos, el aspecto es superficial y tal vez poco perceptible. Sin embargo, con el tiempo tiende a exacerbarse a medida que la piel empieza a descolgarse de forma natural.
¿Cómo se pueden eliminar?
En cuanto a los tratamientos, se pueden considerar las cicatrices onduladas y las “en furgón” hermanas, de modo que lo mencionado anteriormente se puede aplicar aquí (¡incluidos los ácidos naturales caseros y el retinol!).
Y, lo bueno es que las onduladas tienden a ser más receptivas al tratamiento en general: responden mejor a diversos tratamientos en comparación con otras cicatrices.
Los estudios también han demostrado que las cicatrices onduladas responden bien al microneedling, un tratamiento en el que un médico hace rodar un dispositivo (similar al Dermapen o Dermaroller) sobre el rostro creando pequeñas lesiones para estimular la producción de colágeno.
Es probable que tengas que realizar unas cuantas sesiones, y los resultados tardan entre seis semanas y tres meses, mientras que los resultados completos tardan aproximadamente un año.
En casa, también puedes usar un serum o crema de ácido glicólico o láctico por la noche. Estos ácidos eliminan suavemente las capas superficiales de la piel y fomentan la producción de colágeno para ayudar a alisar la piel irregular. Y como remedio casero, la rosa mosqueta.
Hipo o hiperpigmentación
No son técnicamente una cicatriz como las anteriores, pero suelen incluirse en este grupo cuando se habla de acné. Según la escala estándar de clasificación del acné más aceptada, los problemas de pigmentación se consideran “maculares”, o la forma más leve.
Se trata de manchas superficiales en las que el pigmento de la piel se altera debido a la inflamación.
Esencialmente, cuando la piel está inflamada, puede desencadenar o detener la producción de pigmento. La hiperpigmentación en tonos de tez pálidos suele tener un aspecto rojo o rosado, mientras que los tonos de piel más oscuros suelen tener un aspecto marrón o negro. El pigmento permanece ahí hasta que el cuerpo lo elimina o se exfolia.
La hipopigmentación aparece más clara que el resto de la piel.
¿Cómo se pueden tratar estas marcas?
En algunos casos, estas marcas son permanentes, pero la mayoría desaparecen en un plazo de seis meses a dos años.
Normalmente se puede acelerar el proceso de desvanecimiento con los ingredientes tópicos adecuados. Busca productos con la etiqueta “iluminador” o “corrector de manchas” o que contengan potentes antioxidantes como la vitamina C, como nuestro Serum Despigmentante/Antimanchas que combina la niacinamida, la arbutina y la vitamina C para corregir las imperfecciones y las manchas cutáneas.
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Queloides
Ahora bien, por otro lado, los queloides son cicatrices hipertróficas, lo que significa que en lugar de un hundimiento de la piel, hay un exceso de tejido cicatricial.
Se forman como consecuencia del acné y también de lesiones generales. Aparecen con más frecuencia a causa del acné corporal.
¿Cómo se pueden quitar los queloides?
Los queloides requieren intervención dermatológica, y no hay mucho que puedas hacer por tu cuenta. Además: Si los desarrolla una vez, probablemente significa que corres el riesgo de desarrollarlos de nuevo.
Ingredientes a tener en cuenta:
Aunque es importante adoptar un enfoque específico para el acné y las cicatrices, he aquí una buena lista general de activos que pueden estimular la renovación celular, exfoliar, iluminar y mejorar el aspecto de la piel.
Retinol.
Se trata de un compuesto derivado de la vitamina A, un micronutriente esencial (el organismo no sintetiza la vitamina A de forma natural, por lo que es necesario suministrársela). Está disponible sin receta médica en concentraciones bajas.
El retinol se engloba dentro del término “retinoides”, que incluye todos los derivados de la vitamina A, tanto los de venta libre como los de prescripción. Pero a veces, “retinol” se utiliza para la vitamina A en sí, o se utiliza indistintamente con “retinoide”.
Es un ingrediente muy apreciado porque favorece la producción de colágeno, acelera la renovación celular, aumenta la densidad dérmica, controla la producción de grasa y mejora la textura.
¿Cómo mejorar la textura de la piel? Aquí te damos 9 consejos + prevención
¿Una crema para las cicatrices de acné con retinol? Nuestra Crema Antiarrugas Noche 50+ para pieles normales a grasas, que cuenta con retinol y vitaminas C y E para disminuir la rugosidad de la piel, igualar el tono y la textura y renovar las células superficiales consiguiendo una mejoría en las cicatrices de acné.
Ácido glicólico.
Este exfoliante químico es un alfa-hidroxiácido -la familia de los ácidos amantes del agua- que actúa sobre la superficie de la piel.
Derivado naturalmente de la caña de azúcar, el ácido glicólico disuelve los enlaces que mantienen las células muertas y opacas en la superficie de la piel para que ésta se desprenda suavemente.
Básicamente, el ácido glicólico (y todos los AHAs) desprenden las células muertas que se encuentran en la capa superior de la piel, allanando el camino para una tez suave y tersa debajo.
Tiene el peso molecular más pequeño de todos los alfahidroxiácidos, lo que significa que puede penetrar en la capa externa con bastante facilidad y es más potente.
Además del producto anterior, nuestra Crema Antiarrugas Noche 40+ también contiene ácido glicólico en su composición, junto con extracto de tara que estimula el colágeno y la elastina natural, consiguiendo una piel más firme y sin imperfecciones.
Ácido salicílico.
El ácido salicílico pertenece a la familia de los betahidroxiácidos (BHA). En caso de que necesites un repaso sobre los BHA, estos ácidos son solubles en aceite, lo que significa que pueden penetrar profundamente en los poros y desobstruirlos en su origen.
Los BHA también tienen propiedades antiinflamatorias y calmantes, por lo que son lo suficientemente suaves incluso para la piel sensible propensa al enrojecimiento y/o la rosácea.
Ácido láctico.
El ácido láctico es un AHA que elimina suavemente las células muertas de la piel. En realidad, este ácido se obtiene de la leche (aunque se pueden encontrar opciones veganas) y se encuentra en exfoliantes profesionales o en productos de venta libre para el cuidado de la piel, como serums, limpiadores, cremas y tratamientos.
El ácido láctico tiene una de las moléculas más grandes del grupo, lo que significa que no puede penetrar tan profundamente como otros. Esto significa que todo el trabajo del ácido ocurre en la superficie de la piel, lo que disminuye la cantidad de irritación y ayuda a proteger la barrera cutánea.
Está presente en nuestra Crema Antiarrugas Noche para pieles secas y sensibles junto con bakuchiol, un retinol natural. Esta crema no solo regenera la capa superficial del rostro, sino que también aumenta y recupera la elasticidad y disminuye la rugosidad de las cicatrices.
Antioxidantes.
Cualquiera puede beneficiarse de los antioxidantes, ya que ayudan a moderar la inflamación y a combatir el daño causado por los radicales libres, dos factores que contribuyen a la formación de cicatrices.
Hay muchos tipos que pueden beneficiar a quienes padecen acné, como la niacinamida, el ácido ferúlico, el té verde y la vitamina E.
Un apunte sobre la prevención
El mejor tratamiento para las cicatrices del acné es evitar que se formen. Así que sé inteligente con el cuidado del acné.
La primera regla es no hurgar en el acné existente. Hurgar en los granos sólo daña el tejido circundante, puede prolongar una lesión y puede fomentar más brotes, comenzando el ciclo de nuevo.
En cuanto a los tópicos, recomendamos un enfoque doble. En primer lugar, se detiene la formación de brotes controlando la población bacteriana. Para ello, nuestro protocolo Nezeni Anti-acné incluye ácido shikímico que produce una suave renovación celular a la vez que inhibe el crecimiento de la bacteria Propionibacterium acnes, que suele ser la encargada del afloramiento del acné.
Y cuando te salga un grano (porque seamos realistas: suele pasar), asegúrate también de calmar la inflamación. Dado que las cicatrices son el resultado de una inflamación perjudicial, cualquier persona que sufra acné podría beneficiarse de un antiinflamatorio tópico.
No te pierdas nuestra guía completa de los 7 tipos de acné: causas y tratamiento
En resumen
Recuerda que las cicatrices de acné son muy comunes y que tú mismo eres tu peor crítico. Sigue un plan de cuidado de la piel que funcione para ti, ya que una piel sana mejorará el aspecto de la tez en general.
Si tienes alguna duda acerca de nuestros productos o protocolos de belleza, estaremos encantadas de ayudarte a través de nuestro contacto: [email protected].